DESVELOS

La identidad de la mujer africana es, en pleno siglo XXI, todo un misterio para la cultura occidental. La artista Angèle Etoundi Essamba ha querido 'desvelar' con su obra una África moderna y multiforme. La mujer africana se presenta como un ser sensual, delicado, enigmático, colorista...

Rojos, azules, naranjas... una explosión de color en las telas que visten sus cuerpos, miradas enmarcadas y profundas de las que el espectador no puede escapar. En algunas fotografías, la artista recurre a la técnica digital para recrear curiosos escenarios, en los que la indumentaria se alarga y forma parte de un todo. Angèle no duda en utilizar encuadres en los que corta cabezas y otros miembros, para centrar la mirada en los bordados, en las manos que muestran pintauñas, en las costuras.

Aunque tendemos a pensar que la mujer africana se ve sometida al uso del velo, en muchas ocasiones es una muestra voluntaria de fe, que les da valor y les reconoce en una sociedad. La mujer sale con velo y se mueve en círculos que antes eran sólo de hombres, y el velo impone una señal de respeto hacia ellas. Las fotografías de esta artista muestran de un modo evidente cómo esta prenda forma parte de estas mujeres y, aparte de ideologías y religiones, les genera un aire de sensualidad, de enigma, de atracción. Las telas de sus vestimentas, de sus bordados, de sus adornos y maquillajes... Eotundi nos obliga a mirarlas con otros ojos. El color vibrante, intenso, predomina y llena de fuerza a las féminas. De mirada intensa y labios carnosos, el espectador no puede escapar al embrujo que emanan las fotografías de esta mujer.En algunas utiliza el photoshop creando curiosas mezclas. En otras, la figura de la mujer es el centro de la fotografía. Retrato a todo color. Pero no todo es rostro: Angéle, como ya hemos dicho, se permite la libertad de cortar cabezas y extremidades a gusto, según lo que desee destacar. El objetivo se centra en las uñas coquetamente pintadas a color de su modelo o simplemente en las costuras de sus vestidos. Una enigmática tripa de embarazada, en blanco y negro, hace sonreír al espectador, a quien le cuesta reconocer, una curiosa manera de ver la maternidad africana.

Angèle muestra una fotografía de retrato a todo color, profunda, de contrastes, enigmática, significativa, que no deja a nadie indiferente.

Reflejos y más Pamplona

Lo que nos rodea, es reflejo de nosotros mismos.


Le preguntaron a Mahatma Gandhi cuáles son los factores que destruyen al ser humano. Él respondió así:La Política sin principios, el Placer sin compromiso, la Riqueza sin trabajo, la Sabiduría sin carácter, los Negocios sin moral, la Ciencia sin humanidad y la Oración sin caridad. La vida me ha enseñado que la gente es amable, si yo soy amable; que las personas están tristes, si estoy triste; que todos me quieren, si yo los quiero; que todos son malos, si yo los odio; que hay caras sonrientes, si les sonrío; que hay caras amargas, si estoy amargado; que el mundo está feliz, si yo soy feliz; que la gente es enojona, si yo soy enojón; que las personas son agradecidas, si yo soy agradecido. La vida es como un espejo:Si sonrío, el espejo me devuelve la sonrisa. La actitud que tome frente a la vida, es la misma que la vida tomará ante mí. "El que quiera ser amado, que ame"

Biblioteca y más fotografías de retrato

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Lugares de Pamplona

Las ciudades son mágicas, misteriosas. Lo viejo y lo nuevo se unen en un mismo escenario, en el que están presentes las marcas del pasado, así como una frenética lucha por ir hacia adelante. En la noche, la oscuridad se ve sorpendida pro miles de luces de casas, farolas, semáforos, puentes... donde todo se confunde y se aleja de la imagen que presenta durante el día.

Retratro de una vida

Dicen que el rostro es el espejo del alma. Contra más mayores, más se encuadran en los pliegues de la piel, en la mirada, en las marcas de expresión todo aquello que hemos vivido: lo bueno, lo malo, lo agradable, lo angustioso, la tranquilidad, el esfuerzo. Todo tiene su reflejo, y la cara es la carta de presentación con la que las personas se nos aparecen y cuentan su propia historia. Aunque, como también dicen, no todo es lo que parece.

En el corazón de Pamplona

La Ciudadela, una zona verde y agradable en el corazón de Pamplona, dond ese puede dar un paseo en compañía de la pareja, o jugar con los amigos un partido de fútbol. Con miles de años a sus espaldas, una estación de autobuses en su interior, y muchas historias escritas en el recuerdo, la Ciudadela pamplonesa recoge ahora hasta envases de comida chinos, no por los SanFermines, sino porque nuevas culturas han llegado a la ciudad. y lo que queda por ver...

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